Este “ahora” puede no haber llegado.
Entonces puedo seguir hablando del Yoga, pero tú no escucharás. Solamente podrás escuchar si el momento te ha llegado.
¿Estás absolutamente insatisfecho? Todo el mundo contestará, “sí”, pero esa insatisfacción no es real. Estás insatisfecho con esto, puede que estés insatisfecho con esto otro, pero no estás totalmente insatisfecho. Todavía albergas esperanzas. Estás insatisfecho con tus expectativas pasadas, pero con las futuras aún estás esperando. Tu insatisfacción no es total. Todavía estás suspirando por alguna satisfacción, por alguna gratificación.
A veces te sientes desesperado, pero esa desesperación no es auténtica. Te sientes desesperado porque no has logrado ciertos anhelos; ha habido esperanzas no satisfechas. Pero la esperanza aún está ahí, la esperanza no ha desaparecido. Aún esperas. Estás insatisfecho con esta esperanza, con esa ilusión, pero no estás desencantado del esperar en sí. Si estás desencantado con el esperar mismo, entonces te ha llegado el momento en que puedes penetrar en el Yoga. Y entonces está introducción no será algo mental, especulativo. Esta entrada será una introducción a una disciplina.
Osho Yoga |
Que “el Yoga es una disciplina” quiere decir que el Yoga quiere crear un centro cristalizado en ti. Tal y como eres, eres una multitud, y una multitud posee muchas características. Una es que no puedes confiar en una multitud. Gurdjieff solía decir que el hombre no puede prometer. ¿Quién será el que prometa? Tú no estás allí. Si tú prometes, ¿quién cumplirá la promesa? Al día siguiente, aquél que prometió ya no estará allí.
La gente acude a mí y me dice, “Ahora haré un voto. Prometo hacer esto”. Yo les digo “Piénsatelo dos veces antes de prometer algo. ¿Confías acaso que el que ha hecho la promesa esté presente dentro de un rato?” Decides levantarte pronto desde mañana en adelante; a las cuatro en punto. A las cuatro en punto, alguien en tu interior dice, “Déjalo. Hace frío afuera. ¿Y por qué tienes tanta prisa? Podemos hacerlo mañana.” Y te duermes de nuevo.
Cuando te levantas te sientes arrepentido, y piensas, “Eso no está bien. Debería haberlo hecho”.Y de nuevo tomas la decisión, “Mañana lo haré”. Y lo mismo sucederá mañana porque a las cuatro de la madrugada aquél que hizo la promesa ya no está allí; otro está en su silla. Y tú eres como el Rotary Club: el presidente va cambiando. Todos los miembros llegan a ser presidentes. Existe una rotación. A cada momento alguien distinto es el amo. Gurdjieff solía decir, “Esta es la principal característica del hombre: no es capaz de prometer”. No puedes cumplir tus promesas. Sigues prometiendo y sabes bien que no podrás cumplirlo, porque no eres uno; eres un desorden, un caos. Por esto Patanjali dice, “Ahora la disciplina del Yoga”.
Si tu vida se ha convertido en puro sufrimiento, si te has dado cuenta de que cualquier cosa que haces se convierte en un infierno, entonces el momento ha llegado. Este momento puede cambiar tu dimensión, tu dirección del ser. Hasta ahora has vivido como un caos, como una multitud. Yoga significa que ahora tendrás que ser una armonía, tendrás que hacerte uno. Se necesita una cristalización, se necesita un centramiento. Y a menos que logres un centro, todo lo que hagas será inútil. Es desperdiciar vida y tiempo. En primer lugar es necesario un centro, y solamente puede ser dichosa una persona que tiene un centro. Todo el mundo quiere tenerlo, pero tú no puedes pedirlo. ¡Has de ganártelo! Todo el mundo suspira por un estado de felicidad en su ser, pero solamente se puede ser feliz con un centro. Una multitud no puede ser feliz, una multitud no posee un Yo. No tiene un atman. ¿Quién será el que va a ser feliz? Osho
Si tu vida se ha convertido en puro sufrimiento, si te has dado cuenta de que cualquier cosa que haces se convierte en un infierno, entonces el momento ha llegado. Este momento puede cambiar tu dimensión, tu dirección del ser. Hasta ahora has vivido como un caos, como una multitud. Yoga significa que ahora tendrás que ser una armonía, tendrás que hacerte uno. Se necesita una cristalización, se necesita un centramiento. Y a menos que logres un centro, todo lo que hagas será inútil. Es desperdiciar vida y tiempo. En primer lugar es necesario un centro, y solamente puede ser dichosa una persona que tiene un centro. Todo el mundo quiere tenerlo, pero tú no puedes pedirlo. ¡Has de ganártelo! Todo el mundo suspira por un estado de felicidad en su ser, pero solamente se puede ser feliz con un centro. Una multitud no puede ser feliz, una multitud no posee un Yo. No tiene un atman. ¿Quién será el que va a ser feliz? Osho